Bukele reacciona ante sabotaje en el transporte público y defiende al pueblo salvadoreño

 

Bukele reacciona ante sabotaje en el transporte público y defiende al pueblo salvadoreño

Durante esta semana, el presidente Nayib Bukele ha demostrado nuevamente su firme compromiso con el pueblo salvadoreño, tomando decisiones contundentes frente a las molestias generadas por los trabajos de infraestructura vial y, más recientemente, ante un intento de sabotaje por parte de ciertos empresarios del transporte público.

Una decisión tomada el domingo: transporte gratuito durante una semana

Fue el domingo que el presidente sorprendió al país con un anuncio inesperado pero muy bien recibido: el transporte público sería completamente gratuito durante toda la semana como parte de las medidas de mitigación ante el tráfico adicional provocado por las obras en la carretera de Los Chorros, una vía estratégica para la conectividad nacional.

La medida abarca buses y microbuses urbanos, interdepartamentales, especiales y ordinarios, beneficiando así a miles de salvadoreños que utilizan diariamente el transporte colectivo para ir al trabajo, estudiar o hacer sus actividades cotidianas.

Bukele detalló que esta decisión busca beneficiar al pueblo en cuatro aspectos fundamentales:

1. Compensación económica: Las molestias del tráfico son reales, y al ofrecer transporte gratuito, el Gobierno proporciona un alivio directo al bolsillo de los ciudadanos.

2. Incentivo al uso del transporte público: Menos vehículos particulares en la calle pueden aliviar el tráfico y favorecer una movilidad más ordenada.

3. Agilización del servicio: Eliminar el pago en efectivo evita filas, discusiones y peleas de vía entre conductores, mejorando la experiencia para todos.

4. Inyección de liquidez: El dinero que las familias ahorran en transporte puede destinarse a otros rubros, moviendo la economía popular.

Este anuncio hecho el domingo fue interpretado como una muestra de reacción rápida y sensibilidad del Gobierno, al entender que las obras generan inconvenientes, pero que estos pueden mitigarse cuando se prioriza el bienestar de la mayoría.

Sabotaje al país: algunos transportistas se niegan a servir, pese al pago garantizado

A pesar de que el Gobierno anunció que cubriría el 100% del ingreso diario que los empresarios del transporte normalmente reciben, varios propietarios de rutas decidieron no salir a brindar el servicio. Una acción que el presidente Bukele no dudó en calificar como un claro sabotaje al país.

“Muchos transportistas creen que aún están en los tiempos de ARENA y del FMLN, cuando podían hacer paros de transporte con total impunidad”, expresó el mandatario, recordando que ese capítulo ya está cerrado.

Bukele también citó el caso del transportista Catalino Miranda, detenido en 2022 por desobedecer regulaciones y desestabilizar el sistema. “Pregúntenle cómo le fue la última vez que intentaron algo similar”, agregó el presidente, dejando claro que la ley se hará cumplir, sin privilegios.

Por eso, instruyó a la Policía Nacional Civil (PNC) a proceder con la captura de los propietarios de las rutas involucradas, reiterando que nadie está por encima de la ley.

El viejo sistema quiere volver, pero el pueblo no lo permitirá

Estas acciones reflejan cómo ciertos sectores del transporte aún creen tener el poder de presionar al Estado, como lo hacían en gobiernos anteriores, donde paros y amenazas eran comunes para exigir más subsidios o influir en decisiones políticas.

Pero la realidad actual es distinta. El pueblo ya no tolera chantajes, y el Gobierno ha demostrado que el orden y la legalidad están por encima de intereses particulares. Hoy, el Estado responde con firmeza, y el respaldo de la población ha sido evidente en redes sociales y medios.

Muchos ciudadanos agradecieron que, por primera vez en décadas, se les priorice a ellos y no a los grupos que antes se beneficiaban a costa de las necesidades de la mayoría.

Los Chorros: una obra necesaria y estratégica

Todo este escenario gira en torno a una gran obra de infraestructura: la ampliación y modernización de la carretera de Los Chorros, una de las más transitadas del país. Estas labores, aunque temporales y molestas, son vitales para garantizar la seguridad, eficiencia y conectividad entre el occidente y el centro del país.

“Primero Dios, cuando la obra esté terminada, todos estos sacrificios habrán valido la pena”, escribió Bukele en su publicación del domingo, subrayando que estas acciones buscan un beneficio a largo plazo.

El plan de transformación vial va de la mano con otros grandes proyectos de nación, como el aeropuerto del Pacífico, Surf City y la modernización del sistema ferroviario. Todo apunta a un nuevo El Salvador que se prepara para atraer inversiones, turismo y desarrollo.

Conclusión: la ley se aplica, y el cambio sigue

La decisión de ofrecer transporte gratuito fue bien recibida, pero la reacción de algunos transportistas dejó claro que aún hay quienes no entienden el cambio de era que vive el país.

El sabotaje no solo fue un incumplimiento, sino un intento de golpear al pueblo y al Gobierno. Sin embargo, la respuesta fue inmediata y contundente: la PNC ya está actuando y el mensaje es claro: se equivocaron de nuevo.

El Salvador avanza, aunque algunos quieran frenarlo. Pero como ha quedado demostrado, ya no hay espacio para los chantajes, y la ley es pareja para todos.